Emprender en tiempos de crisis

Macarena Martínez-Echevarría es una mujer emprendedora de 34 años. Está casada y tiene tres hijos. Macarena tenía un sueño que poco a poco se ha hecho realidad: montar una empresa de organización de eventos.

20 de marzo de 2012

Macarena ha creado una empresa de organización de eventos

En plena crisis económica ¿No es imposible poner en marcha una nueva empresa?
Crear una nueva empresa ha sido un sueño que se ha ido construyendo poco a poco. La palabra crisis no hay que verla desde el lado negativo; hay que considerarla como una oportunidad. La razón por la que el mundo ha llegado a este punto es porque estamos amando las cosas y utilizando a las personas.
Creo que hay que tener ilusión por alcanzar sueños y tener claro que todo es para bien; si algo no sale como uno pensaba, quizá es porque no nos iba a hacer mejorar.

¿Qué claves hay que tener en cuenta antes de montar un evento?
Hay que definir muy claramente unas cuestiones básicas: el tipo de acto, a quién va dirigido, qué objetivo se quiere conseguir o qué fecha sería la idónea.
Una vez claro el tipo de evento, comienza la fase de preparación, que incluye todas las acciones que han de realizarse antes de la ejecución del acto para que éste se desarrolle satisfactoriamente. Es la fase más costosa porque hay que encargarse de cosas de muy distinta índole. 

"En el Vicente Calderón organizamos un homenaje a Forlán en el que se premiaba también la labor de Vicente del Bosque tras el Mundial. Hubo que preparar todo en una semana"

Háblanos de alguno…
En el Vicente Calderón organizamos un homenaje a Forlán en el que se premiaba también la labor de Vicente del Bosque tras el Mundial. Hubo que preparar todo en una semana. Había que conseguir una puesta es escena minimalista y sencilla porque había muchos invitados y era necesario espacios libres. La colaboración del personal del Atlético de Madrid fue increíble. Todos pusieron su granito de arena, ya que nos encontramos con una sorpresa: no había ascensor ni montacargas y todo se subió por las gradas hasta la sala VIP. En este evento nos encargaron también los regalos para cada invitado que es algo que nos gusta cuidar especialmente. 

También disfrutamos preparando los regalos de una convención con italianos, que fue en el Palace de Madrid. A las mujeres, que eran de Milán, se les creó un regalo con toque español: hicimos un pack con un abanico con los colores de la empresa y unas pulseras de cuero; a cada una le colgamos un detalle español en plata. 

Aunque si tengo que quedarme con un evento elegiría el que realicé en agosto: la decoración de la Nunciatura de Madrid durante la JMJ. A todos nuestros clientes los tratamos como únicos, pero es cierto que preparar las estancias de la casa del Papa en esos días fue inolvidable. 

"Si tengo que quedarme con un evento elegiría el que realicé en agosto: la decoración de la Nunciatura de Madrid durante la JMJ"

¿Qué valores caracterizan a tu proyecto empresarial?
Como acabo de decir, nos gusta tratar a cada cliente como si fuera único: con atención y cariño, sin perder de vista que nuestro trato directo con personas nos hace llegar a algo más que a una simple puesta en escena para un día especial. Hay mucha gente que necesita que le dediques tiempo, que le escuches, que le recibas con una sonrisa o le des las gracias. Y, por supuesto, somos honrados con nuestros clientes. 
En los eventos que acompañan la celebración de un sacramento (bodas, bautizos, comuniones) trato siempre de sacar a relucir la belleza del mismo, para que la fiesta, el banquete o los regalos no nublen la esencia de lo que se está celebrando.

¿Qué pueden aportar los emprendedores en este momento de crisis generalizada?
Puestos de trabajo y optimismo. La orientación espiritual que recibo en el Opus Dei –soy supernumeraria desde hace doce años- me ayuda a tener una visión cristiana de la vida: se puede dar testimonio de lo importante que es no perder de vista lo que realmente nos da la felicidad. Tener casas o coches no nos hace felices. No hay que perder la ilusión porque estemos atravesando un bache. Se descubren oportunidades de reciclarse, de generar una “mudanza” en nuestras vidas para mejorar como personas. Hay que poner corazón en lo que se hace. Detrás de un trabajo en el que has puesto el corazón hay alegría. Hay que enamorarse de lo que uno hace sin olvidar que en el trabajo hay que tener competencia profesional y servir a los demás.